Dar la vida a una causa digna en vano,
del amor sus entrañas palpitantes
que nos hace mostrarnos como amantes,
en silencio noche manda callar.
Nos prendimos como vela encendida
en un fuego tan intenso de llama,
que el propio amor era para quien se ama
niño en juego que está aprendiendo a amar.
Mi amor, belleza sin igual dulzura,
tu forma de mis ojos en preciosa
silueta, baila, me quita el beber
mis penas, me alegra y eterna me dura
la alegría en el rostro de la rosa,
del jardín decidió fuerte crecer.
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